lunes, 3 de octubre de 2011

COME, REZA, AMA


Es increíble ver cómo no existen las coincidencias... Cómo desde hace más de lo que pensamos está todo dispuesto de esa forma en la que ocurre...Unos lo llaman destino, otros suerte, fortuna o azar...
Yo, personalmente, prefiero pensar que es algo mucho más Grande...un Plan perfecto del que cada uno formamos parte...
Y, os preguntaréis ¿a qué viene todo esto?...Os lo diré: Hace poco, en un momento algo "crudo" una gran amiga me prestó un libro...
En ese momento, no le hice mucho caso, pero es que, cómo ya os digo, está todo perfectamente preparado para el instante más oportuno...
Pues sí, hasta en estas pequeñas cosas me gusta pensar que hay Alguien que vela por nosotros y que nos cuida hasta en los más mínimos detalles...
Sólo me queda recomendaros el libro en cuestión, de verdad, que a mí me ha encantado...
Os dejo también el trailer de la película ( qué aún no he visto, pero que...veré)




viernes, 23 de septiembre de 2011

sueña

La idea de los sueños me fascina, ese rincón en el que a veces vivimos, que crece con nosotros y que nos ayuda a crecer, que nos hace, o debería, hacernos mejores y llegar mas alto. Hace unos días vi unos spots muy buenos sobre los sueños, de loterías y apuestas del estado. Buscando el que me llamó la atención en televisión encontré los demás que tampoco tienen desperdicio. Os dejo el que más me gustó y otro de los encontrados en la búsqueda.



sábado, 14 de mayo de 2011

Pequeños detalles...



Demasiado tiempo sin escribir, lo sé... Pido disculpas, y espero que sepáis que no es por falta de ganas sino de tiempo...



Hoy me gustaría compartir con vosotros uno de esos hechos y anécdotas que te alegran el día, y que quizá leas en algún e-mail y digas "¡Oh, qué bonito!", pero que pienses que eso nunca te ocurriría a tí...



Esta semana ha sido por unas cosas y otras bastante dura y complicada, y este hecho me hizo darle un pequeño giro...



Yo llegué a la universidad, corriendo, creía que iba a llegar tarde, y rápidamente para empezar a trabajar cuanto antes me acerqué a la biblioteca a alquilar un ordenador portatil para poder hacer mis tareas.



En eso, mientras el hombre encargado de esto al otro lado del mostrador iba en busca del ordenador para entregarmelo debió notar en mi cara o en mi expresión esa tensión y agobio que yo llevaba dentro ese día,...no sé como lo hizo en realidad, porque yo no era consciente de que mi cara estuviese siendo un espejo tan claro, pero por lo visto...sí.



Esta persona me miró, me sonrió y sacó una gran piruleta roja con forma de corazón y me la tendió diciéndome : " Ten, para que se te endulce la tarde" y no dejó de sonreirme y transmitirme paz con su mirada en lo que duró ese momento...



Fue un regalo que yo necesitaba en ese momento, y estaré por este pequeño, pero en realidad GRAN gesto siempre agradecida...

jueves, 17 de marzo de 2011

Siempre hay una razón...

Llevo ya varios días abriendo nuevas entradas que al final por falta de tiempo o de inspiración se quedan siempre en el cajón del olvido. Tenía una historia, a la que algún día encontraré final, e incluso algo de poesía. También había pensado escribir sobre lo que la semana pasada ocurrió en la capilla de la Universidad de Somosaguas, pero seguro que ya hay bastante dicho sobre el tema, así que he decidido compartir mas alegría que tristeza y, para ello, nada mejor que este vídeo, que me ha dejado impresionada.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Seré maestra...


Cuando digo que soy maestra de infantil, la gente, en general, responde con un ¡AH!, tan soso que te gustaría exclamar:¿Dónde más podría atar lazos en el pelo, ajustar cinturones, y ver desfiles de moda a diario?.¿Dónde aunque siempre me vista de la misma manera me dirán q mi vestido es el más bonito?¿En qué sitio, sino allí, me abrazaría un apuesto jovencito y me dirá q me quiere?¿Dónde eres tan importante que le has de limpiar los mocos a la estrella del desfile?¿En qué otra parte olvidaría mis penas porque tengo que atender tantos arañazos, cocos y corazones afligidos?¿Quién recibe más flores que yo?¿Dónde más podría guiar, en la escritura de las primeras letras, una manita que quizá algún día escriba un libro?¿En qué otro lugar recibiría el regalo de sonrisas?¿En qué otro sitio me haría un retrato grratis?¿En qué trabajo cuando faltas dos días te reciben con los brazos abiertos?¿Dónde puedes ver en primera fila la ejecución de grandes obras de arte?¿Dónde conservaría el alma joven, sino con un grupo cuya atención es tan efímera, que siempre debo tener a mano una caja de sorpresas?¿En qué otro sitio derramaría lágrimas porque hay que dar por terminado un año de relaciones felices?Me siento grande trabajando con pequeños.Espero que algún día lleguemos a ser grandes maestras/os.



Creo que cada vez lo tengo más claro... :)

domingo, 20 de febrero de 2011

Algo para pensar...


Hoy me han contado una historia que ya había oido con anterioridad, pero que ha conseguido de manera especial hacerme pensar...

El relato era acerca de una señora que un día tuvo que viajar a Madrid desde Sevilla, donde ella residía; pero resultó que ese día llegó tarde a la estación y perdió el tren.

Preguntó entonces cuando pasaba el siguiente, y así tras haberse comprado una bolsa de patatas y un refresco se sentó a esperar pacientemente a que viniera el próximo tren que podría llevarla a su destino.

Estando en la sala de espera se dispuso a leer para pasar el rato de un modo más ameno. Cuando al otro lado de la mesita que separaba su sitio del de al lado se sentó un chico joven.

Mientras ella leía iba comiendo las patatas hasta que vió con asombro como aquel chico la miraba sonriente y cogía de su bolsa también.

Ella no daba crédito y cada vez lo miraba más y más extasiada y más y más furiosa y pensaba para sus adentros: "¿Cómo será capaz de tener tanta cara dura de estarse comiendo mis patatas?"....Y así hasta que se fue terminando la bolsa y ya sólo quedaba la última patata.

La mujer pensó para sus adentros "¡Ya sería el colmo que también se la comiera!" . Ya no cabía en sí de la indignación cuando vio al joven coger esa última patata sin dejar de sonreirla y partirla en dos, dándole a ella la mitad.

Ya llegó la hora de subirse al tren, y al ir a entregarle el billete al revisor, aquella señora metió la mano en su bolsillo y...¿Cuál fue su sorpresa?...Ahí estaba su bolsa de patatas, exactamente en el lugar donde ella la había guardado.

Aquel joven muchacho le había dado una lección: ella había sido la que le había estado quitando aquellas patatas que él había comprado, y mientras ella cada vez estaba más y más enfadada pensando que era al contrario, el chico no había dejado de sonreirla y de compartirlas con ella hasta el final.


Quizá os parezca algo muy anecdótico, pero en realidad se asemeja en cierta forma a un gran número de situaciones con las que nos encontramos día a día y a las que es fácilmente aplicable esta filosofía de vida.

Espero que os haya gustado y os haya ayudado al menos un poquito.